Hace ya 4 años que comencé a correr (en Junio de 2010, en pleno Mundial de Sudafrica). Para ese entonces vivía en Seattle y el gimnasio del barrio era pequeño y aburrido.
Me despertaba martes y jueves a las 5:45 am para salir a las 6, correr 15 minutos en dirección sur y 15 minutos de regreso a la casa, estirar, bañarme y arrancar a trabajar a las 7:30. Ya llevaba 5 meses en Estados Unidos y obviamente me habia subido de peso (“con la cara redondita” en palabras de Calle 13), no me quedaban los jeans que me había traído de Colombia, así que debajo de la almohada metí uno de los jeans para acordarme cuando sonara la alarma por qué era que me tenía que levantar para ir a correr. Además de correr, volví a nadar y tomaba clases de spinning en el gimnasio. En esas ando desde hace cuatro años.
Recuerdo que el hit musical del momento era el Waka Waka y yo escuchaba esa cancion durante los 30 minutos que estaba en la calle. Duré tres semanas con esa rutina hasta que me agarró un dolor en las rodillas que no me dejaba casi ni caminar… Runner’s knees según mi autodiagnóstico googlero. Pero seguí nadando y cuando se me pasó el dolor, volví a correr y desde ahí no he parado.
Hace dos años me di cuenta de los errores tan grandes que cometí por novata en esto del running y que me llevaron a experimentar ese dolor de rodillas tan fuerte e incapacitante. Pero bueno, más adelante hablaré de esos temas.
Por ahora quiero comenzar este proyecto del blog agradeciendo a mi madre por enseñarme la disciplina y la constancia que se requieren para este tipo de deportes tan solitarios; a mi esposo, por apoyarme siempre y acompañarme a todas las carreras en las que he participado; y a todos mis amigos que en la distancia me entusiasman y se alegran con mis logros.
Mi idea es compartir con ustedes la experiencia de participar por primera vez en una Media Maratón y aunque estoy a 5 semanas de finalizar mi entrenamiento, esta es la fase mas importante y en la que más apoyo necesito. Quiero que me acompañen en esta etapa y que experimenten de mi mano toda la cruzada existencialista por la que una corredora psicóloga y shaolín pasa antes de enfrentarse a correr 21 kilometros en San Francisco, California.
10 Comments
Hola Natiss,,,,,estoy por aqui !!!!!!
Hola Tioooo!
Gracias =) Por ahí me andará leyendo, tengo mucho que contar. Besos!
Cierto! Muy Cierto!, la constancia vence lo que la dicha no alcanza, eso es lo que te tiene donde estás, pues nunca has desfallecido, siempre has sabido y he sabido que eres muy capaz y que nada ni nadie te detiene. P’lante es p’ya…p’ tras ni p’ coger impulso…. 🙂
Querida mía, este Blog está especialmente dedicado a ti porque quiero que algún día corras conmigo alguna media maratón! Te amo mucho!
Nat, que emoción me da leer todo esto 🙂 Sin duda seguiré atenta a cada post. Te cuento que en mis metas también está el medio maratón. Felicidades por esta gran experiencia 🙂
Mi Venice hermosaaaa! Recuerdas esas madrugadas que nos pegábamos? Gracias por salir conmigo en aquellos inicios de mi pasión! Han pasado ya cuatro años!!! Me encantaba correr contigo porque por cada paso tuyo yo tenía que dar como cuatro para ir al tiempo!!! Gracias por el apoyo!!!!
[…] y pensar que no nos lesionaremos, es un grave error. En una de las primeras entradas de El Blog de Nati, les contaba que cuando comencé a correr me dio algo llamado “runner’s knees” […]
[…] llegaron hasta acá y les da curiosidad mi primera entrada, aquí se las dejo: Faltan 5 Semanas para la Media Maratón. Ojalá no les dé curiosidad porque tiene muchos errores de puntuación y ni fotos […]
Hola te conocī en 21 korredores, desde entonces no paro de leer tus blogs
, son buenisimos un abrazo.
Diana!!! y viniste a parar al primer post!!!! Que pena (inserta aquí la cara del miquito tapándose los ojos) jajajaja Gracias por leer! No dejes de comentar 😉
Un gran abrazo!