Esta carrera es diferente a las demás porque no sólo fue una carrera de entrenamiento para el Ironman, sino que fue una carrera a 2600 metros de altura.
Esta foto fue de antes de empezar a correr esta mañana. Cuando por fin Jota tenía su número de carrera 😆 Hubo una cadena de malosentendidos, de ligereza en la organización y de reacciones poco diligentes por parte de quienes manejan SM que terminaron con que Jota no tuviera su dorsal a tiempo, pero luego de exigir un poco, esta mañana se lo entregaron y todo salió bien. Al final sólo hubo soluciones, eso es lo importante. Gracias a todos los que nos colaboraron para lograr participar en esta carrera, sin su ayuda, no hubiese sido posible. Camilo Merchán (eres un ángel), Pao y Bibi (mil gracias) y a Carlo Polo de 21Korredores. No tengo como agradecerles tanto apoyo.
Corrimos toda la carrera con Ximena a quien conocí por el reto #AdictasAlPlank, vive en Villavicencio y me dijo al principio que en el primer puente ella se podría quedar así que siguiéramos sin ella. No fue así! Siempre fue ella quien nos marcó el paso y nos sirvió de referente con su ritmo parejito y calmado. Incluso en los múltiples intervalos caminando que tuvimos q tomar Jota y yo, ella siempre estuvo a la vista. Fue una gran ayuda para echar pa’lante! Gracias Xime! En el km 9 apareció @davgrafico, amigo de Jota de cuando estudiaban ambos Diseño Gráfico en Barranquilla (hace marras, cuando Jota tenía pelo!)
DavAyuda fue invaluable: aunque él venía a un súper ritmo, cuando nos alcanzó se quedó con nosotros y nos acompañó incluso a caminar, nos contó historias y demás. Sin ellos dos, esta carrera hubiera sido una tortura china porque la altura y unos cólicos salvajes me venían acabando y a Jota la rodilla lo tenía corriendo como #patecumbia 🙂
Me costó mucho esta carrera, pero me motivaba saber que mi mamá nos estaba esperando en la meta 🙂 Caminamos montones. Los primeros 5k salieron bien y optamos por incluir intervalos caminando, entonces caminamos 1 minuto y de ahí en adelante más o menos cada 2km debíamos hacer intervalos, ya fuera pa’ yo agarrara aire o pa’ que Jota estirara la pierna, pero durante todo el recorrido recibí mucho apoyo de muchos que me siguen en redes y eso siempre hará que correr en Colombia sea de las cosas más valiosas de lo que me ha traido el running. La vuelta alrededor del lago del Parque Simón Bolívar se me hizo eterna, pero fue el segmento que mejor aire se podía respirar. La parte de los puentes es muy dura porque los carros y buses van botando mucho dióxido de carbono y eso yo lo sentía horrible.
Se me hacía muy difícil comerme las gomitas (calorías sólidas) y correr al tiempo, no se imaginan, así que a mitad de carrera opté por ingerir calorías líquidas (Gracias a Gatorade!) y eso fue de gran ayuda para terminar fuerte porque me costaba mucho masticar. Al km 8 llegué a sentir mareo y dolor de cabeza, ahí tuvimos q bajarle al ritmo y enfocarme en regular mi respiración y abrir caja torácica para darle espacio a los pulmones. Algo similar a lo que sentí en Maratón de Las Flores en septiembre, así que ya sabía qué debía hacer. Eso de correr por esfuerzo percibido es la mejor alternativa en condiciones como las de los 2600 metros de Bogotá. Correr por pace o con algún objetivo de tiempo debe ser muy frustante. No se hagan eso si no juegan de locales o si son de a los que la altura les da duro como a mí.
Cuando faltaban 500 metros y lograba ver la meta, pude cerrar dignamente a un ritmo de menos de 5:50/km. Eso sí, ese ritmo acabó con el poco oxígeno que me quedaba disponible. Me dejó acabada y con los cólicos alborotados.
Al cruzar encontramos a mi mamá quién nos contó que el celular se le descargó justo cuando pasamos la meta :(, pero bueno, lo importante es que estaba ahí y que nos había comprado bocadillo con queso que fue mi salvación al terminar.
Al salir del corral de llegada fuimos recibidos por nuestro club adoptivo, los 21Korredores y con ellos compartimos las experiencias de carrera y los planes para el Ironman la otra semana. Cuando vengo a Bogotá y entreno con ellos de verdad que me hacen sentir como entre viejos amigos. Siento en ellos la misma familiaridad que siento con mis Pasadena Pacers y sé que tienen filosofías similares: hacer del running algo accesible para todo el mundo sin distinción de género, poder adquisitivo o condición social. El caso es que me siento como en casa.
Acá les comparto algunas fotos de la manana.
Y eso fue la New Balance 15k. Mi primera carrera en Bogotá y que corrimos más por determinación que por otra cosa porque todo fue muy accidentado y complicado. Sufrida. Este era un entrenamiento, pero si no hubiéramos estado en carrera, posiblemente hubiéramos parado en el kilómetro 10 y hasta ahí habría llegado el entrenamiento. Sin embargo, hicimos los 15k en 1 hora 49 minutos y logramos disfrutar del running bogotano por primera vez. Un running que está lleno de apasionados y aficionados sin pretensiones de ninguna clase. No vi a la gente preocupada por el tiempo o estresada, confirmando lo que dice @irwoman de que #lasredessocialesnosonlavidareal en donde muchos se obsesionan con el tiempo y dan una imagen distinta de lo que realmente es correr. Un ambiente entre la gente un poco frío y sobrio, pero supongo que eso con el tiempo irá cambiando a medida que se sienta más el sentido de comunidad y fraternidad que promueve el running.
En fin! Una y mil veces, gracias a todos los que hicieron posible que participaramos en esta carrera. Por último, un saludo especial para Pilar Camacho por sus bellas y motivadoras palabras al final de la carrera. A Óscar Caro por esos primeros kilómetros que me hicieron tan feliz al escuchar todas las buenas cosas que se vienen para el equipo David y Óscar. A Luis Alfonso, porque ha sido un honor por fin conocerlo en persona y saber que corre con un corazón tan noble y tan fuerte. Gracias a todos.
7 Comments
Ay Nati. Esperé en la meta sólo para verte y tomarme una fotito… Casi que pasé desapercibida pero bueno. Felicidades!
Hola Carito! Yo recuerdo perfectamente haberte visto. Fuiste la primera persona que vi al final de la carrera. No sé por qué crees que pasaste desapercibida, pero bueno, esa debe ser tu percepción y ante tu forma de percibir las cosas yo no puedo hacer nada. GRacias por haber estado ahí. No sabía que ibas a correrla. Gracias enormes por la presión que me ayudaste a ejercer en redes sociales y que sin duda ayudaron a que nos dieran las entradas.
Abrazos enormes. Espero que estés bien. Andas perdida.
Hola Natalia, apenas ayer supe de ti. Muy interesante tu blog y ya tienes un seguidor más de 21 Korredores. Bienvenida siempre a Bogotá!
Hola Luis!!!
Me alegra mucho que te haya gustado mi blog. Ha estado un poco quieto este fin de año porque o entrenaba pa’l Ironman o blogueaba y pues ya te imaginarás cuál preferí 😉 Pero ya empiezo de nuevo a publicar seguido para compartir lo aprendido.
Abrazos enormes y espero que nos veamos prontooo!
Nati, fue increíble correr contigo y con Jota, Tu fuerza y motivación me ayudan cada día con mi pasión por el running…Gracias por tu buena energía y por transmitirnos la disciplina, constancia y alegría que se requieren para lograr nuestros objetivos…Gracias también por recordarme en la carrera que no debía desfallecer!!!
Un Abrazo Gigante
Xime
Te cuento que retomamos #AdictasAlPlank en enero y espero poder contar contigo 🙂 Abrazos!
Natalia I love the adventure I can see how happy you were we all are very proud of you I only wish you the best and more adventure in the running world 🌎 👍🏼💪🏼🏃🏻👸🏼